31/10/08

En la hora del Gallo...

El sistema tradicional japonés para marcar el tiempo dividía el día en dos, con el mediodía y la medianoche como eje y a su vez estas mitades en seis partes cada una, numeradas del nueve al cuatro, ya que los números uno, dos y tres estaban reservados en la tradición budista para llamar a la oración.
Al estar el conteo del tiempo vinculado a la posición del sol, la duración de cada "hora", que además se designaba mediante un signo del Zodíaco chino, variaba según la estación del año y la numeración era descendente ya que tradicionalmente se controlaba mediante la quema de incienso.

7 Comments:

erizo said...

¡Qué chulo!

1133k said...

Gracias!

CRISTINA said...

Lo del incienso, mal, es que el olor no me gusta nada.
Muy interesante tu post.

1133k said...

Si te refieres al incienso "de misa" a mi tampoco...

CRISTINA said...

A todos los inciensos.
Soy anti-incienso.

170651978 said...

LLegó la hora, entonces, de dejar de contar el tiempo, aunque para ello hayamos tenido, o tengamos que seguir aprendiendo a contarlo de cuantas infinitas maneras se ha hecho hasta ahora...

Elucubraciones. El movil me lo recuerda a diario.

1133k said...

Ah! si posicionarse fuese siempre tan sencillo como con el incienso...

170651978 debo confesar que no me he enterado de nada...ruego aclaración, por vía interna si te place.